Terapia Familiar ¿Cuándo es necesaria?
La terapia familiar ¿Cuándo es necesaria?
La familia es el núcleo de desarrollo de los individuos y es muy importante. Fundamental, cómo aprendas a desarrollarte en ella para tus futuras relaciones personales. Siempre, a lo largo de tu vida son importantes las relaciones que una persona mantiene y lo que surgen a partir de estas.
En ocasiones, lo que a todos nos gustaría es tener familias funcionales y ser capaces de gestionar todo lo que implica ser miembro de la misma. Pero, sin embargo, nos tenemos que enfrentar a situaciones difíciles. Para tener éxito en la resolución del conflicto, es en muchos casos más fácil que sea un profesional objetivo y con conocimientos en la materia el que medie entre las posturas. Además, dotar a las partes de herramientas y que ese conflicto se convierta en un aprendizaje vital y oportunidad de crecimiento personal es lo ideal.
Casos en los que es recomendable? La terapia, es necesaria
- Crisis familiares, problemas intrafamiliares que no pueden ser resueltos que no pueden ser resueltos por los medios tradicionales, cambios vitales de uno de los miembros, nacimiento de un hijo, duelos no resueltos, enfermedades, adicciones, emancipación de los hijos, crisis de pareja, infidelidades, síndrome de cuidador, etc…
- Problemas de conducta de uno de los miembros. Especialmente cuando se trata de un hijo adolescente, las formas de comunicación de la familia son muy importantes y su regulación y normas.
- Educación de padres, coeducación. Gestión de emociones de padres e hijos que repercute el bienestar en todos los ámbitos de la familia.
- Entrenamiento de padres para poder hacer frente a las conductas desadaptativas de los hijos y la estimulación positiva a través de la parentalidad positiva
Ir a terapia no te crea ni te destruye, solo te transforma.
— Acudir a terapia te hace más fuerte
Posición del psicólogo, terapeuta o mediador
La terapia familiar tiene una consecución de niveles y el psicólogo debe hacer que todos los miembros sean capaces de ir superándolos para que todos tengan la posibilidad de efectuar el cambio.
Cada núcleo familiar es distinto pero el profesional tiene que mantenerse objetivo e imparcial, por norma general tendrá una posición equidistante pero con especial cuidado si hay menores. Deberá lograr que todos los integrantes de la familia den su opinión, sean escuchados y valorados.